A modo introductorio en este pequeño escrito quiero presentar dos ideas concretamente: por un lado el hecho
de que la producción mundial de alimentos ha aumentado aunque esto no
quiere decir que el hambre en el mundo haya disminuido, y por otro lado un
índice muy alto de esa producción mundial de alimentos se desperdicia. Estas
dos realidades estas muy vinculadas al desarrollo sostenible del planeta,
afectando a este a niveles tan elevado que muchos de nosotros ignoramos.
La producción de alimentos ha
aumentado en los últimos 50 años, se ha producido un crecimiento notable que
incluso ha superado las cifras de aumento de población. Actualmente se puede
afirmar que la producción de alimentos es lo suficientemente grande para
abastecer a toda la población del mundo, pero por el contrario en la actualidad
aproximadamente 830 millones de personas pasan hambre y presentan un estado de
desnutrición. Esta escasez no solo se presenta en los países subdesarrollados
sino que en los últimos tiempo se ha producido un incremento de este estado en
los países desarrollados.
La principal causa no ha sido la falta de alimentos para poder consumir, sino más bien las pobreza de algunos países para poder adquirir los alimentos. En lo relacionado al consumo, números estudios afirman el aumento de este, sobre todo en los países desarrollados, donde se puede observar un ligero aumento en los últimos años en lo que se refiere a la media de la ingesta calórica que un ciudadano toma al día. Esta realidad representa un claro indicador de que la producción ha aumentado pero no significa, como hemos dicho antes, que continúe existiendo personas con serios problemas de desnutrición.
La principal causa no ha sido la falta de alimentos para poder consumir, sino más bien las pobreza de algunos países para poder adquirir los alimentos. En lo relacionado al consumo, números estudios afirman el aumento de este, sobre todo en los países desarrollados, donde se puede observar un ligero aumento en los últimos años en lo que se refiere a la media de la ingesta calórica que un ciudadano toma al día. Esta realidad representa un claro indicador de que la producción ha aumentado pero no significa, como hemos dicho antes, que continúe existiendo personas con serios problemas de desnutrición.
Un estudio de la Organización
de las Naciones Unidas para la Alimentación y la agricultura (FAO) asegura que
se desperdician el 30% de la producción mundial de alimentos. Por lo tanto, se
presenta una realidad un tanto contradictoria, porque preferimos votar todos
esos alimentos que no se consumen antes que dárselos a aquellos que realmente
lo necesitan. Preferimos continuar contribuyendo a destrozar el medio ambiente
con la cantidad de maquinarias que empleamos para poder sintetizar los
desperdicios y seguir viendo como niños mueren en todo el mundo a causa de la
malnutrición, lo que queda claro es que las tendencias y patrones de consumo y
producción de alimentos son una de las causas principales de presión sobre el
medioambiente.
Información
obtenida de:
Fuente: Agricultura mundial: hacia los años 2015/2030. FAO (2015) Depósito de documentos de la FAO. Enlace: http://www.fao.org/docrep/004/y3557s/y3557s06.htm Fecha de consulta: 28/02/2015
Fuente: Se desperdicia el 30% de la producción de alimentos: FAO. El economista (2014). Enlace: http://eleconomista.com.mx/internacional/2014/10/24/se-desperdicia-30-produccion-mundial-alimentos-fao Fecha de consulta: 27/02/2015
Fuente: Agricultura mundial: hacia los años 2015/2030. FAO (2015) Depósito de documentos de la FAO. Enlace: http://www.fao.org/docrep/004/y3557s/y3557s06.htm Fecha de consulta: 28/02/2015
Fuente: Se desperdicia el 30% de la producción de alimentos: FAO. El economista (2014). Enlace: http://eleconomista.com.mx/internacional/2014/10/24/se-desperdicia-30-produccion-mundial-alimentos-fao Fecha de consulta: 27/02/2015
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