1.3.15

Nuestro consumo es enemigo de la sostenibilidad

Aunque muchas veces nos resulte difícil comprenderlo, el problema del desarrollo sostenible se vincula muy directamente con nuestra forma de consumir los recursos de los que disponemos. En sociedades actuales como las nuestras, que han evolucionado en una era de globalización y capitalismo, es imposible obviar el hecho de que nuestras decisiones y elecciones como consumidores afectan a la vida de trabajadores en lugares lejanos y en la forma en que viven las demás personas, es decir, que generan impacto ambiental, económico y social en todos los niveles.

Fuente: ExpokNews. Enlace: http://www.expoknews.com/consumo
-de-recursos-naturales-en-el-mundo-es-insostenible-onu/
En primer lugar, hemos de entender que el consumo, en líneas generales, supone la cantidad total de recursos cogidos del medio ambiente para satisfacer nuestras necesidades, tales como agua, tierra, alimentos, energía, etc. Sin embargo, no tenemos en cuenta la brecha que se abre entre consumo y regeneración de recursos, pues mientras el consumo se acrecienta, la producción de recursos puede ir disminuyendo. Tendemos a creer que los recursos de los que disponemos son una fuente inagotable y que podemos utilizarlos y consumirlos de manera descontrolada, o que unos pueden sustituir a otros cuando se hayan acabado, pero no somos conscientes del gran impacto que genera ese consumo descontrolado en nuestro ecosistema y, por tanto, en nosotros mismos.

Hoy en día, encontramos pruebas de que muchos cambios ambientales que está sufriendo la Tierra, tales como cambios en el clima, la extinción de especies, o la presencia de residuos y elementos contaminantes, son consecuencia de nuestro modelo actual de consumo, que no nos afecta únicamente a nosotros, sino que ya limita las oportunidades de las generaciones futuras para abastecerse, de modo que ya no tendríamos esa sostenibilidad que pretendemos. Y es que, como comentábamos anteriormente, consumimos más de lo que puede producirse, las industrias llevan a cabo patrones de producción que no miden la cantidad de recursos naturales que utilizan ni el grado de contaminación que producen los mismos, o la explotación que se lleva a cabo en otros países, entre otros muchos aspectos.
Fuente: Pensando el territorio. Enlace: http://www.pensandoel
territorio.com/explicando-el-cambio-climatico/

En los países industrializados, sobre todo, es donde más recursos consumimos, lo que produce grandes cantidades de residuos, más de lo que sería sostenible, pues dichos residuos acaban siendo expulsados al aire, al agua y a la tierra, contaminando el medio ambiente y relacionándose directamente con los motivos que producen el cambio climático. Por ello, es importante fomentar un modelo de consumo más sostenible, en todos los sentidos, lo que significaría cuestionarse a la hora de comprar qué es prescindible y qué no; cuáles son nuestras disponibilidades económicas reales y, después, elegir los productos no sólo por su precio o su calidad, sino también porque son respetuosos con el medio ambiente y porque las empresas que los elaboran cumplen con los derechos humanos y los principios de justicia social.

Es importante entender que el consumo sostenible no consiste necesariamente en consumir menos sino en consumir mejor, es decir, de manera más eficiente, reduciendo los riesgos para nuestra salud y para el medio ambiente. El consumo sostenible reconoce que los modelos actuales de consumo fomentan una producción insostenible y la degradación de los recursos. El consumo sostenible no abarca únicamente los comportamientos de compra de los consumidores, incluye también todos los tipos de interacciones entre las personas y las infraestructuras (movilidad, ocio, vivienda) que dan forman a sus estilos y medios de vida. El consumo sostenible exige una convergencia de los modelos actuales de consumo y que todos consumamos de manera responsable. El consumo sostenible puede generar beneficios económicos, bienestar social e inclusión social (acceso a los mercados, innovación, creación de empleo, estilos y medios de vida más saludables), además de reducir los riesgos ambientales y sacar provecho de las oportunidades ambientales.

Información obtenida de:
Fuente: Consumo sustentable. CEADU. Enlace: http://www.ceadu.org.uy/consumosustentable.htm Fecha de consulta: 27/02/2015
Fuente: Problemas de consumo insostenible. CEADU. Enlace: http://www.ceadu.org.uy/documentos/Problemas_del_Consumo_Insostenible.pdf Fecha de consulta: 27/02/2015
Fuente: Consumo y producción sostenibles y los objetivos del Desarrollo Sostenible. PNUMA (2015). Enlace: http://www.unep.org/post2015/Portals/50240/Documents/spanish/UNEP%20Briefing%20Note%202%20150514.pdf Fecha de consulta: 27/02/2015

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